La contaminación urbana es un problema real que cada vez ocupa más portadas en los periódicos. En el último año, la escasez de lluvias ha agravado la situación y más de veinte ciudades españolas han sobrepasado los límites de polución establecidos, una realidad que nos afecta y nos debe preocupar a todos.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 400.000 personas mueren prematuramente cada año en la Unión Europea por la mala calidad del aire y varios millones padecen enfermedades respiratorias y cardiovasculares provocadas por la contaminación. Estos datos ponen de manifiesto la urgencia de encontrar soluciones.
Hay muchas cosas que se pueden hacer para conseguir un aire más limpio y saludable. El gran reto que tiene el mundo es descarbonizar la economía. En este sentido, si hay un sector que evolucionará en el futuro para dar respuesta a esta transición ecológica ese será el transporte.