La revolución de la impresión 3D en alimentación y restauración
La impresión 3D también ha llegado al sector de la alimentación. Esta tecnología, que ya es una realidad y que promete revolucionar la industria alimentaria, permite sustituir muchos de los procesos de fabricación, ya que se puede personalizar cada ingrediente tanto en su forma como en su composición . En la actualidad, ya contamos con algunos ejemplos de empresas que ha hecho su incursión de la impresión 3D como PepsiCo o Barilla, las cuales están trabajando para incorporar esta tecnología en sus líneas de negocio. Algunas impresoras para alimentos que se muestran en ferias y congresos son ChefJet o Foodini, esta última de creación española. También existen numerosas investigaciones que se están llevando a cabo en universidades como en el MIT o la Universidad de Jiangnan . En España, en concreto en Barcelona, contamos con una de las plataformas globales más importantes en pro de la innovación relacionada con la impresión 3D y la comida: Shapeat , que tiene como objetivo conectar a todos los actores que intervienen en esta interesante industria y, por supuesto, también a los consumidores.
¿Qué es tendencia en alimentación?
Dentro del área de la alimentación, destaca el desarrollo de la impresión de comida 3D elaborada con masas de microalgas, un ingrediente de gran potencial alimentario y en el que se investiga actualmente con el objetivo de desarrollar una mayor variedad de alimentos, a partir de la mejora de las fórmulas de las masas y de las impresoras. El profesor titular del departamento de Tecnología de Alimentos de la UPV (Valencia), Javier Martínez, fue el encargado de presentar estas masas.
Considera que son muy útiles “tanto para revalorizar productos como para adaptarlos a poblaciones especiales, como los ancianos o los niños”, explica.
También Singular Bread , una startup cordobesa , ha desarrollado y patentado la primera impresora 3D de picos , capaz de crear múltiples y caprichosas formas con un coste asequible. Esta es la primera panadería 3D que utiliza esta tecnología para crear picos de pan dirigidos a un sector gastronómico más innovador.
En el caso de Barilla , tal y como ya mencionamos, lleva años invirtiendo en la impresión 3D de pasta. Fueron de las primeras empresas en presentar en la Feria de Milán las posibilidades de esta nueva tecnología, incluyendo una modalidad de pasta que se convierte en ‘rosa’ al contacto con el agua hirviendo . La idea de la empresa es alcanzar altos niveles de personalización de producto , tanto en restaurantes como en el uso doméstico.
El chocolate y el azúcar son los ingredientes más utilizados en las impresoras 3D de comida, debido a su facilidad para pasar de estado líquido y a sólido al enfriarse. Por tanto, las posibilidades de personalización son infinitas , el límite está en la creatividad de cada usuario o marca, por ello, empresas como Hershey’s o creativas como Dinara Kasko están incorporando impresoras 3D en sus instalaciones para poder ofrecer a sus clientes la opción de personalizar sus productos.